En Barrica Creativa hemos insistido en muchas ocasiones en la idea de que el diseño y el vino están íntimamente ligados. Si no somos grandes expertos en la materia, ¿qué es lo que nos lleva a comprar una u otra botella? Pues la gran mayoría de las veces de lo que nos fiamos es de lo que nos llama la atención de esa botella, es decir, de su diseño, del diseño de su etiqueta y como no, del nombre.
Los nombres de los vinos no se buscan por casualidad, y sin duda, algunas bodegas han querido, con determinadas denominaciones, llamar la atención de ese posible comprador indeciso que va buscando algo realmente original.
Como muestra un botón, y aquí os dejamos algunos vinos curiosos con nombres realmente llamativos.
Vino de la bodega Gil Berzal elaborado con uva tempranillo, graciano y garnacha tinta. Es el primer y único vino tinto del mundo que posee la Declaración Ambiental Certificada EPD.
De Edra Bodegas y Viñedos llega este vino con nombre de pájaro haciendo homenaje a la grulla que dos veces al año elige el entorno de sus viñedos para descansar en su viaje de norte a sur. Elaborado con las variedades Merlot, Cabernet Sauvignon, Tempranillo y Garnacha tinta este vino joven es digno de degustar.
De Puta Madre
Con un nombre cuanto menos evocador, se presenta este verdejo refrescante que al menos a tenor del nombre de su etiqueta debería de estar ¡buenísimo!
¿Comprarías estes vinos? Seguramente sí y, sin duda, tu atención la llamarían con tan sólo verlos en la estantería de la bodega de cualquier vinoteca, supermercado, etc. o con tan sólo escuchar su nombre.
En Barrica Creativa nos han parecido realmente unos vinos curiosos.