¿Qué queso combina mejor con mi botella de vino?
Hay tantas variedades de vino que a veces es difícil elegir la compañía gastronómica perfecta. Todos sabemos que una buena carne siempre marida con un vino tinto con cuerpo y sabor, y por otro lado, los vinos blancos casi siempre van de la mano de los platos de pescado, así aportan frescura y toques afrutados. En esta ocasión, en Barrica Creativa queremos ir más allá y recomendarte cómo maridar vinos y quesos, para esos momentos de aperitivo, pues no solo tomamos vino en las comidas o en las cenas.
Primeras nociones sobre maridaje entre vino y queso
Para empezar esta recomendación, debes saber que los vinos blancos son los que mejor coinciden con quesos blandos y de sabores fuertes, pues el sabor del vino no se pierde. Por otro lado, los vinos tintos se emparejan con los quesos curados de sabores más suaves. Los vinos afrutados, es decir, los blancos dulces, son los que mejor maridan con los quesos en general, así que si no sabes qué vino elegir, esta variedad puede ser todo un acierto.
Ejemplos de maridaje entre vino y queso
Cabernet Sauvignon: Altamente combinable con quesos fuertes, como por ejemplo el queso azul. La mezcla entre la frescura del vino y la dureza del queso hace que se pueda disfrutar de ambos sabores por igual.
Chardonnay o Sauvignon Blanc: Para esos vinos recomendamos quesos como el Brie o el queso Camembert. Estos olorosos contrastan muy bien con los aromas cítricos del Chardonnay.
Merlot: Quesos duros, como el Cheddar, son una mezcla excelente para este vino.
Pinot Noir: Los aromas a fresas y a frambuesas de este vino maridan con quesos blandos como el Gruyere.
Vinos espumosos: El frescor de estos vinos deben ir de la mano de un buen queso Gouda, le dará cuerpo y le restará ligereza al queso.
Zinfadel o Riesling Dulce: Estos vinos se pueden combinar con queso Gorgonzola, un queso con mucho sabor y cremosidad.
Tintos de cuerpo medio: Recomendamos quesos fuertes, como por ejemplo, el queso de Cabra. Le aportará un sabor intenso.
Recuerda sacar los quesos de la nevera media hora antes de que aparezcan tus invitados, así el producto cogerá su forma y sabor original y no estarán muy fríos. Además, puedes colocarlos en diferentes tablas de madera con tarjetas con sus nombres. ¡Hará que tus comensales estén encantados con tu aperitivo de vinos y quesos!